Yo a ti

Espero entiendas que este escrito es un tributo a lo que tu me hiciste, porque verdaderamente me encanto. Y si quieres mas detalles pues no me queda mas que pedirte nuevamente que leas algunos escritos de este blog.

Las experiencias que nos han marcado nos llevan a ser perfectos el uno para el otro, las dolorosas, las angustiantes y las agradables.

Construí una persona alrededor de mi mismo, a través de experiencias, me convertí en una persona a quien interesaban mas los demás que si mismo, para quien Dios era una persona tan importante como sus amistades contadas con los dedos de la mano. Llego una persona que cambio mi vida, y me hizo cambiar. Descuide amistades, me enfrasque. Y al final de la relación me importaba mas yo mismo que ninguna otra cosa; porque yo era el que ya no sabia como vivir, porque yo era el centro del mundo y nadie se daba cuenta. Busque amistades que me rechazaron y otras que me intentaron ayudar. Pero no fue hasta que una persona me dijo: es que ella te cambio, tu solías ayudar y ahora solo buscas lo contrario. Y así entendí que necesitaba encontrarme de nuevo, para volver a ser yo mismo, obviamente habiendo cambiado gracias a las experiencias, buenas y malas.  Pero cambiado por mi y para mi.

Busque respuestas, platique con mis padres, hice nuevos amigos, y encontré a Dios como refugio y razón de vida. Porque sin el yo no sería nada.

Seguí caminando y me encontré al fin; reflejado en algo maravilloso y que siempre había estado dentro de mi, oculto: Mi País, México. Fue momento de tomar decisiones, ¿la política o la religión? Ambas igual de corruptas, pero, donde me quería Dios.

No lo se, pero al fin y al cabo yo estoy seguro que la vocación es un 1% escrita y 99% decidida por uno mismo. Y así fue como me encontré a mi mismo en una decisión. Y empezaron a fluir las cosas.

Cuando te deje de buscar apareciste…

Así es, y ya te lo he dicho. Por un tiempo creí que yo no volvería a estar dispuesto a entregarme. Que en la universidad tal vez encontraría alguien que me entendiera. Y ahí es en donde mi soberbia se equivocaba; fui a encontrarme a la persona mas perfecta, inteligente y hermosa en mi misma escuela, y yo, no la había visto. Desde un primer momento me llamaste la atención, y te puedo asegurar que eso solo ha ido acrecentando. Desde un primer momento yo sabia que si a alguien me iba a entregar eras tu, y así lo he hecho.

Y pensé que jamás volvería a decir un te amo. Porque para mi esas palabras ya no tenían sentido. Y llegaste tu… a revolucionar mi mundo

te amo Claudia

gracias los mejores primeros tres meses de una vida